
La chirimoya es una fruta tropical de forma oval, cónica, esférica o en forma de corazón, de 7,5-12,5cm de longitud y con un peso entre 150g y 1kg. La piel es reticulada y de color verde. La pulpa blanca es jugosa, dulce, muy aromática y de sabor dulce algo ácido. Contiene numerosas semillas aplastadas de color negro de 1cm de longitud.
Es un fruto originario de los Andes, desde donde se extendió por América Central y algunos países Mediterráneos.
Se consume sobre todo como fruta fresca. También se añade a macedonias y sorbetes y se puede usar para elaborar mermeladas, batidos o helados.
La chirimoya es un alimento rico en vitaminas y minerales. Destaca por su contenido en vitaminas A y C y en fósforo y calcio. Es adecuada para personas con problemas cardíacos, hepáticos o renales.